Está semana estuve tentada a llamarte.
Había tantas cosas que te confiaba que mi memoria ahora es inútil para las cosas importantes.
No recuerdo la última fecha del servicio del carro ni que fue lo último que se le reparo.
Nunca me aprendí caminos ni direcciones porque siempre iba contigo a todos lados.
Ahora siento que retomar todo eso que te encargaba se siente tan pesado, y de repente me siento una niña jugando a ser adulta cuando no estás conmigo.
Hay días en que pienso que por fin ya no te extraño, pero entonces pasa algo y me recuerda que es mentira. Entonces pienso cuánto tiempo falta para que deje de recordarte y se me caiga la sonrisa. Cuando voy a dejar de esconderme para llorar cuando algo me recuerde a ti.
Siento que camino por la vida como en un campo de minas, sin saber que paso de repente me va a recordar a ti y me va a explotar en montones de pedacitos. Todo siempre por dentro.
Y ya quiero que sea ese día pero al mismo tiempo no.
