Defensa propia

Cuando lo recuerdo
siento que me retuerzo por dentro,
que me quiebro en mil pedazos
cuando su voz suena y otra vez
dentro de mi cabeza.
-Mafe?- me dijo y voltee.
Era ella con sus gafas y
su delgada boca.
Mochila al hombro y sosteniendo
una agenda de las que venden
en las paradas o de las que te regalan.
-Como estas?- pregunto.
-Bien- conteste, siguiendo la corriente
pensando que seria un encuentro normal,
como cualquier otro.
Inconsciente y estúpidamente
pregunte como le iba.
-Bien- me dijo- viendo las cosas
para la licenciatura.
ZAS!
Primera punalada.
Así de la nada.
-Ah, que bueno.
-Si -continuo ella-
en marzo es la graduación.
ZAS!
-Pero -oh oh! aquí viene!!
-que tu no te tendrías que graduar también?
Si tu entraste conmigo verdad?-
ZAS, ZAS, ZAS, ZAS!
Si, es cierto TENDRÍA que hacerlo.

En mi mente pensaba mil formas de matarla,
y luego desaparecer de la faz de la tierra.
En el mundo real, le explique
que por diferentes motivos
(mi culpa todos)
me había atrasado un poco.
Ella continuo vanagloriándose (hablando normal),
-Me costo bastante la verdad- dijo-
con todo eso de que el ano pasado
tuve a mi bebe y lo de las practicas.
ZAS, ZAS!!

Es cierto, recuerdo verla en los pasillos,
caminando con una gran panza.
Pero esas veces no me hablo.
-Si me imagino.- sonreí.
Y ella me sonrió.

Que tan grave seria,
pense,
matar a una persona
con un lapicero
adentro de un banco
en una universidad privada,
llena de cámaras?

Podría alegar que fue en defensa propia,
ella me hirió antes. Me mato.