Muchas veces me he preguntado que siente un maestro cuando su alumno fracasa. Yo al menos, siento que no estoy haciendo algo bien, que le estoy fallando a mi alumnito y que por eso no llega a lo esperado. Cuando un alumno no logra lo que se espera, sinceramente como podes decir "Ay si pobrecito pero es que no le hecho ganas". ¬¬ ¿Y tu que? ¿No lo tendrías que haber ayudado? ¿No tendrías que haberte preocupado por el? Enseñar no es solo pararse frente a una clase y hablarle a los alumnos. Decirles "esto es lo que tienen que lograr" sin realmente haber intentado de todas las maneras posibles explicarles COMO lograrlo.
En mi vida de alumna me he topado con toda clase de maestros. Detesto a aquellos que asumían que mi pereza era lo que me hacia fracasar porque en realidad esa es una excusa. Para mi cuando un alumno fracasa, el maestro fracasa también.
Nunca olvidare por ejemplo, a Miss Ines mi maestra de tercero primaria. Recuerdo que tenia que enseñarnos como multiplicar números de tres dígitos por uno de dos; pero yo parecía no entender. Siempre lo hacia mal. Hasta que un día me dijo que me quedara un rato en el recreo. Se sentó a mi lado y con mucha paciencia me explico hasta que me di cuenta que era lo que estaba haciendo mal. Recuerdo su sonrisa cuando se dio cuenta que POR FIN yo, una de sus alumnas más problemáticas había comprendido. Ella definitivamente no sabia que yo tenia problemas de atención, pero nunca se dio por vencida.
¿Que hubiera sido de mi si ella no hubiera insistido? Probablemente hubiera perdido el grado, hubiera tenido que repetir y mi vida seria completamente diferente. Pero gracias a que ella no fue perezosa y tuvo la paciencia de explicarme; gracias a su deseo de ENSEÑAR logre hacer las multiplicaciones.
Esos maestros, los que se devanan los sesos hasta que su alumno aprende, esos SI son maestros.
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